Estados Unidos exigió al régimen cubano la devolución de la prófuga de la justicia estadounidense Joanne Chesimard.
También conocida como Assata Shakur, la fugitiva refugiada en Cuba, está señalada desde 2013 en la lista de los terroristas más buscados del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
En un comunicado oficial, el Secretario de Estado, Marco Rubio, recordó el viernes el aniversario del crimen contra el policía de New Jersey por el que fue condenada.
"Hoy, 52 años después de su brutal asesinato, recordamos al agente de la policía estatal de Nueva Jersey Werner Foerster. Su asesina, Joanne Chesimard, huyó a Cuba y sigue siendo buscada por EE. UU", escribió el cubanoamericano al frente de la diplomacia y, ahora, de la Seguridad Nacional de EEUU.
La Militante del Ejército Negro de Liberación en 1977 fue declarada culpable de asesinato en primer grado y otros delitos y condenada a cadena perpetua.
Menos de dos años después se fugó de la cárcel con ayuda de amigos radicales y vivió en la clandestinidad antes de reaparecer en Cuba en 1984.
El Secretario de Estado dijo que "el régimen cubano debe dejar de celebrar a asesinos conocidos y entregar inmediatamente tanto a esta fugitiva asesina como a todos los demás fugitivos estadounidenses".
El cambio en la política hacia Cuba se ha constatado desde la primera jornada del mandato del presidente Trump. Entre las medidas más importantes de su primer día en el cargo fue "mantener a Cuba en la lista de países que patrocinan el terrorismo".
En el documento "Restaurando una política dura hacia Cuba", el secretario Rubio denuncia que la dictadura cubana ha apoyado durante mucho tiempo "los actos de terrorismo internacionales" y que Estados Unidos exige "que el régimen ponga fin a su apoyo al terrorismo y deje de proporcionar alimentos, vivienda y atención médica a asesinos, fabricantes de bombas y secuestradores extranjeros, mientras los cubanos pasan hambre y carecen de acceso a medicamentos básicos".