Las autoridades de la cárcel Quivicán, ubicada en la provincia Mayabeque, no han proporcionado atención médica al preso político Roberto Pérez Fonseca, quien sufre fuertes dolores abdominales debido a un empeoramiento de su padecimiento gástrico.
“Cada tres meses tiene que verlo un especialista, pero no lo han llevado. Hace más de 15 días que está con los dolores fuertes y no ha tenido atención y aquí no hay medicamento ninguno. Cuando tiene el dolor, se inyecta el medicamento Omeprazol que yo le llevo, pero eso es para aliviar, pero está sangrando. Atención no tiene ninguna”, denunció a Martí Noticias, Lisset Fonseca, la madre del preso político condenado a 10 años de privación de libertad por romper una foto de Fidel Castro durante las protestas del 11 de julio del 2021 en San José de las Lajas.
La señora se presentó este martes en el penal para exigir a los oficiales al mando que garanticen la asistencia de un gastroenterólogo para su hijo, afectado por esofagitis aguda, duodenitis eritematosa y congestiva y agobiado por úlceras bulbo duodenales.
“No han salido a atenderme. El de la Seguridad del Estado me llamó para decirme que si yo había traído los medicamentos, que lo van a evaluar mañana, primero por el médico de la prisión. Yo le respondí ´que me quedo, que necesito hablar con un jefe´”, explicó la madre a nuestro medio.
“Me quedo plantada afuera de la prisión hasta que lo atiendan debidamente. Se lo dije, ya esto es una urgencia y no voy a dejarlo morir”, dijo.
Una funcionaria del establecimiento penitenciario entrevistada por Martí Noticias aseguró que el preso político sí recibe cuidado médico, sin embargo, se negó a ofrecer detalles sobre este caso.
Los servicios médicos deficientes y la escasez de medicinas continúan siendo el principal problema que enfrentan los reclusos en la isla, de acuerdo al Centro de Documentación de Prisiones Cubanas, que ha logrado verificar numerosas muertes bajo custodia por esa causa.
En agosto del 2024, los familiares de Pérez Fonseca denunciaron que el personal de la prisión le robaba las jeringas con las que se administra su medicamento.
El activista cubano exiliado en Canadá, Alberto Fonseca Ortega, conocido en las redes sociales como Albert Fonse, ha expresado, en repetidas ocasiones, preocupación por la vida de su hermano Roberto Pérez Fonseca.
“El deterioro de la salud de Roberto es a pasos agigantados, provocados por celdas de castigos por exigir libertad. A mi hermano le quedan más de siete años de injusta condena y no sé si saldrá vivo de ella. Lo están matando lentamente”, denunció.
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